Pues sí... después de romper
varios cántaros yendo y viniendo a la fuente, por fin arranca nuestra primera
obra internacional...
Se trata de una casita de vacaciones en medio
de los Alpes austríacos, en la región de Vorarlberg. El solar, situado a media
ladera en un estrecho valle y orientado a sureste, disfruta de unas vistas
espectaculares. En invierno basta con dejarse deslizar ladera abajo para llegar
al remonte de la pista de esquí, y en verano se puede disfrutar de unos paseos
maravillosos (con desnivel, claro) directamente desde la puerta de casa. Vamos,
que la vecina se podría llamar Heidi... Para que os hagáis una idea esta es la
vista desde el solar...
Como no podía ser menos en esta
zona, la casa (a excepción de los muros de contención de planta baja) está
íntegramente construida con madera: muros exteriores, divisiones interiores,
forjados y fachada.
Esta región de Austria, de lógica
tradición maderera, es especialmente conocida por haber sabido conjugar desde
los años 80 la experiencia y el conocimiento secular en el uso del material con
una apuesta desacomplejada por la arquitectura moderna, el uso de las últimas
tecnologías y la sostenibilidad. De hecho, desde el primer momento los clientes
(una familia "normal" de la zona) estaban decididos a construirse una
casa contemporánea, sin caer en el simple mimetismo con las viviendas
tradicionales del entorno.
Por lo demás, el programa está
pensado para estancias cortas y, a pesar de las reducidas dimensiones, sí que
incorpora elementos de la arquitectura tradicional, como el ámbito exterior
previo a la entrada y protegido de la nieve ("Schopf") y la galería
acristalada orientada a sur ("Balkon"). Para el murete de contención del jardín hemos planteado reutilizar la madera de una cabaña vieja que existía en el solar.
En fin, estamos muy ilusionados, así que esperamos dentro de poco poder ir mostrando el resultado...