Zamora es una ciudad pequeña, algo más de 66.000 habitantes, y alejada de los circuitos turísticos, pero una visita de gran interés para cualquier amante de la arquitectura. Desde este post queremos compartir con vosotros nuestra imagen de la ciudad.
Fue la primera ciudad del mundo con cobertura global Wifi, recibiendo el proyecto, llamado "Zamora Hot City", el Nobel de la informática, el "Computerworld Honors", aunque el servicio acabó por desaparecer.
Todo el casco histórico está perfectamente cuidado y tiene, además de pequeños espacios ajardinados, plazas y abundantes bancos, un pavimento de granito que unifica el recorrido. En él se pueden ver 14 iglesias, un castillo, murallas, un puente, dos palacios y nueve casas de estilo Románico, alguna fachada gótica o renacentista, y 19 edificios modernistas, pero sobre todo obras de los mejores arquitectos españoles de este siglo.
Siguiendo el recorrido desde el perímetro de la ciudad amurallada, y empezando por una obra de un clásico de la arquitectura moderna española, planteamos un recorrido por ocho de las obras nuevas más singulares de la arquitectura contemporánea de Zamora.
Ver Paseo por Zamora. en un mapa más grande
Alejandro de la Sota, construyó estas viviendas con 43 años (1956-57), ya experimentado en proyectos de vivienda de los poblados de absorción, y a punto o ya dentro de la redacción de sus primeros proyectos de madurez (TABSA, Miraflores, Gobierno Civil…) Su acercamiento siempre sencillo y respetuoso al entorno genera el primer diálogo entre la ciudad histórica existente y el nuevo lenguaje moderno. Nuevas composiciones, nuevos materiales, nuevas soluciones, pero siempre desde el respeto.
Seguimos la Calle Santa Clara hasta la Plaza Mayor, y continuamos por la Calle Ramos Carrión, en la que encontraremos el Teatro Ramos Carrión, un proyecto excelente de Mgm arquitectos, que comenzó en el año 1995 y acaba de ser finalizado. La rehabilitación y ampliación del Teatro superpone a los muros del jardín en el que se asienta una caleidoscópica volumetría de cristal que refleja el cielo de Zamora. Los espacios interiores, elegantes y llenos de luz se vuelcan al Duero desde su posición elevada.
Un poco más adelante, en la Plaza de Viriato, se encuentran las nuevas oficinas para la Diputación de Zamora, obra de G+F arquitectos. El edificio, contundente, fruto de un concurso de arquitectura, plantea desde una integración cromática y material, un elegante juego de vacíos que articulan los espacios interiores.
Prácticamente enfrente, en la calle rúa de los Francos, se encuentra el Archivo Histórico Provincial de Zamora, obra del Estudio hand architecture (Sergio de Miguel + Cristina Lopez). Se trata de una rehabilitación sumamente respetuosa del convento de la Concepción. Hacia el exterior volverá a su estado original y reparará lo existente. En el interior, un elegante patio articula con un lenguaje actual, los nuevos usos que acoge el edificio.
Aprovechando para callejear, en dirección Oeste, llegaremos a la plaza de la Catedral, donde se encuentra una de las últimas obras finalizadas en Zamora, la Sede del Consejo Consultivo. Obra de otro maestro, ya clásico, de la arquitectura española, Alberto Campo Baeza (en colaboración con Pablo Fernández), este proyecto, finalizado en 2011, y fruto de nuevo de concurso internacional, recupera los valores de lo escondido, de la mirada, del material y la luz que tan bien domina el arquitecto gaditano.
Desde la plaza de la Catedral, accederemos a los jardines del Castillo de Zamora, en fase continua de restauración, y donde ha intervenido en mayor o menor medida Rafael Moneo. Dentro del recinto, está la casa de los gigantones, donde se encuentra el museo de Baltasar Lobo (escultor zamorano contemporáneo). Las esculturas de este escultor salpican los jardines de la muralla.
Saliendo del Castillo, hacia el Este, y en descenso hacia la ribera del Duero, llegaremos al puente medieval que cruzaremos para llegar a la Fundación Hispano Lusa Rei Afonso Enriques, obra de Manuel de las Casas. El edificio de acero corten se apoya sin apenas tocar los muros existentes, mirando a Zamora, aprovecha los restos del convento gótico para articular un espacio entre abierto y cerrado digno de ser visitado.
Queríamos dejar para el final una de nuestras obras preferidas de Zamora. Desandando el camino del puente, y yendo hacia la Plaza Mayor, nos encontraremos con el Museo de Zamora, obra de Mansilla+Tuñon. Un clásico escondido, brillantemente articulado, engarzado con la ciudad (dar una vuelta alrededor, recomendable). Los materiales, recorridos y la luz en las salas superiores, a parte de una exposición que no debemos perdernos, hace que sea un buen final de recorrido.
ENHORABUENA por el post! Hace un par de años hicimos una actividad llamada "ZAXXI. arquitectura zamorana del s.xxi" por sí te puede interesar.... Y al final, la intervención en el castillo fue del arquitecto Zamorano Paco Somoza ya que la propuesta de museo de Moneo se quedo sobre papel....
ResponderEliminarQuizá tb te guste esta otra visita: http://cajondearquitecto.com/2013/01/21/desde-zamora-con-morales-mariscal-y-poyo/
Gracias! Conocemos la actividad, de hecho fue uno de los libros de consulta que utilizamos para el post. No teníamos muy claro el tema de la intervención de Moneo en el castillo, gracias por la aclaración.
EliminarUn saludo
Y enhorabuena por vuestra obra que he comenzado a conocer!
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